Una familia se encuentra pasando por el drama que atraviesan todos aquellos que no tienen un techo propio para vivir. El joven matrimonio y sus dos pequeños hijos han ocupado una casa que se encontraba abandonada y en pésimas condiciones argumentando que no tenían donde vivir, pero, como es lógico que sucediera, apareció la dueña de esta vivienda, los denunció, fueron citados en la fiscalía local y, según ellos relataron, luego de ser tratados muy mal se los intimó a que desalojaran el inmueble o serían sacados por la fuerza.
El joven es hijo de la convecina Cristina Maldonado, aunque hasta hace poco vivía en Colón y con su mujer, que se encuentra embarazada, y sus dos hijos vinieron a radicarse en la ciudad de su madre, pero por ahora no tiene posibilidad alguna de encontrar otro lugar donde cobijarse, por lo que, nos relató, la única solución que encontró fue habitar este inmueble abandonado.
Relató que en la Fiscalía se involucró en la causa también a su madre y a su tía, cosa que le pareció insólita. Lo mismo que la celeridad con la que actuó en este caso la Justicia, ya que al otro día mismo de haber ocupado la casa, ya había una causa armada y una orden de desalojo.
Por su parte, su madre, nos relató había sido citada en la Fiscalía y le habían dicho que su hijo que volviera al lugar donde pertenecía, que "para qué lo había traído a Rojas?".
Lamentablemente, otra vez se hace tangible la necesidad de los humildes, la desprotección de la que son víctimas, la insensibilidad que presentan algunas personas y el drama de que un matrimonio, con niños pequeños no tenga la posibilidad de acceder una casa digna para vivir.
Esperemos que, una vez más, las autoridades municipales tomen cartas en el asunto y ayude a esta familia que hoy está necesitando solidaridad.
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